La Steam Machine de Valve recibe los elogios de un antiguo ejecutivo de Xbox

La recién anunciada Steam Machine de Valve ha desencadenado una ronda familiar de enfrentamientos entre plataformas en Internet, pero uno de los antiguos ejecutivos más conocidos de Xbox ha intervenido para enfriar la temperatura. Larry Hryb, conocido como Major Nelson, pasó más de dos décadas dentro de Microsoft y fue testigo de varias oleadas de rivalidad entre consolas. Su respuesta al último debate llega con la firmeza de quien ha visto repetirse el ciclo demasiadas veces.

En un post en el que reflexionaba sobre el primer día de avances y comentarios, Hryb recordaba directamente que los videojuegos no necesitan un campo de batalla cada vez que llega un nuevo hardware.

"No todo necesita un ganador o un perdedor. La elección siempre es buena. Juega dónde, cómo y cuándo quieras. Donde TÚ encuentres TU diversión es lo único que importa". - Larry Hryb

El comentario se produce tras una oleada de especulaciones sobre si la máquina compacta y preconstruida de Valve debería considerarse un competidor de Xbox, PlayStation o la próxima revisión de hardware de Nintendo. La Steam Machine es técnicamente un pequeño PC diseñado para su uso en el salón y no una consola tradicional, pero su diseño y posicionamiento invitan a comparaciones con dispositivos con un lugar más claro en el mercado. Valve ya se ha adentrado antes en este terreno, pero el nuevo proyecto llega en un momento en que las estrategias de hardware híbrido se han hecho más comunes en toda la industria.

La opinión de Hryb refleja un cambio más amplio dentro de los grandes editores. Aunque la máquina ha llamado la atención por su tamaño y su facilidad de uso, su importancia radica más en las opciones que crea que en la amenaza que supone. Su mensaje subraya ese punto con un argumento conciso: los clientes se benefician cuando hay más caminos hacia el mismo ecosistema de software.

El actual jefe de juegos de Microsoft, Phil Spencer, se hizo eco de esta idea y definió Steam Machine como un paso más hacia un acceso más amplio. Señaló el valor de las plataformas abiertas y la posibilidad de que tanto jugadores como desarrolladores se muevan con menos restricciones. Esta postura también se alinea con el movimiento de Microsoft hacia un hardware centrado en el PC, pensando en su próxima generación. Un dispositivo que combina la familiaridad de la consola con la flexibilidad del PC se acerca a la dirección que la propia compañía está explorando.

Valve, por su parte, se ha afianzado en el mercado a través de Steam y sus esfuerzos por hacer que los juegos de PC estén menos ligados a los tradicionales escritorios y torres. El Steam Deck demostró que hay espacio para formas más portátiles de jugar con el PC, y la Steam Machine supone otro intento de salvar las distancias entre formatos sin forzar a los usuarios a entrar en categorías rígidas.

El debate en torno a la superioridad de las plataformas seguirá su curso habitual, pero la respuesta de dos altos cargos de la historia de Xbox muestra un notable cambio de tono. En lugar de prepararse para el conflicto, ambos hacen hincapié en una mayor accesibilidad y una confianza más sosegada en la solidez de las bibliotecas de software de todos los dispositivos. En ese sentido, Steam Machine representa otra opción en un panorama que valora cada vez más la flexibilidad frente a la rivalidad.